Antiguamente, se estudiaba con base en disección cadavérica y eso no permitía estudiar el movimiento sino solo como estaba constituido el cuerpo humano, en referencia a: huesos, articulaciones, músculos, tendones, sistema nervioso, y al tratarse de un cadáver evidentemente no se podía entender su funcionamiento. Es claro que el entrenamiento es funcional, cuando FUNCIONA, y esto es lo que más confusión genera, ya que el cuerpo humano es realmente perfecto en poder adaptarse a las diferentes funciones que le imponemos, lo que significa que aun entrenando de una manera inespecífica respecto a lo que buscamos lograr así y todo podemos encontrar algún nivel de mejoría, comparando con el nivel de función que había previamente al entrenamiento realizado.